El Ayuntamiento de San Javier ya busca la empresa que se encargue de realizar lo que en el pliego publicado llaman “encintado nuevo de acera” de 2100 metros y el acabado de un tramo de paseo marítimo existente de 100 metros aproximadamente. Esto es, una acera y completar un tramo del paseo marítimo aun sin completar. Se han presupuestado 637.502,75 euros.
“La Gran Vía de La Manga comienza su desarrollo en los años 60 en los primeros kilómetros (pertenecientes al termino municipal de Cartagena) y siguió su crecimiento en el T.M. de San Javier que se extiende desde el P.K. 4,5 hasta el final. Dicho crecimiento ha estado estrechamente relacionado con las épocas de expansión económica, llegando a su máximo nivel de expansión en la primera década del año 2.000. El desarrollo de las infraestructuras ha estado ligado al desarrollo urbanístico y en la actualidad, se pueden encontrar servicios urbanos de todo tipo en todas las zonas de La Manga”, pone en antecedentes el contrato.
“La Gran Vía de La Manga se extiende de sur a norte a lo largo de 19 km, perteneciendo los 4 primeros kilómetros al Término Municipal de Cartagena y los 15 restantes al Término Municipal de San Javier. Esta lengua de tierra tiene la vertiente del Mar Mediterráneo por el este y la vertiente del Mar Menor por el oeste. Entre el kilómetro 13 y 14 discurre el canal del Estacio, desde este canal, por la costa del Mar Menor se ubica Playa Chica. El tramo de actuación discurre aproximadamente desde el hito DP-28 al hito DP-59 del deslinde 34. De sur a norte, existen varios tramos de paseos marítimos de 6 metros de ancho realizados y puestos al uso público”, añade el pliego.
Uno de los problemas que han denunciado los vecinos al Ayuntamiento es la falta de aceras o tramos continuos que impiden “el normal tránsito a lo largo de la costa, no cumpliendo la Orden TMA/851/2021, de 23 de julio, por la que se desarrolla el documento técnico de condiciones básicas de accesibilidad y no discriminación para el acceso y la utilización de los espacios públicos urbanizados”, señala el contrato. “Por otra parte, en dunas y otros espacios de la citada playa y fincas colindantes existen especies vegetales protegidas, que se ven afectadas por el paso de viandantes al no existir una zona acotada de paso. Por todo ello es necesario solventar estas discontinuidades en los paseos marítimos y crear una unidad funcional, siendo la solución constructiva más viable para la conexión e integración ambiental la ejecución de un encintado de acera. De esta forma, se tiene menor impacto en el suelo de la playa y en el paisaje; se concentra el paso de los viandantes en el paseo y no en la playa, sirviendo para delimitar las zonas con especies protegidas y evitando que los transeúntes las pisen, facilitando el desarrollo de flora en su entorno por la proliferación de semillas”, explica el contrato.
“Los principales objetivos de la actuación se resumen en mejorar la accesibilidad y seguridad peatonal; contribuir a la protección e integración ambiental de la zona; aumentar la calidad de vida de los ciudadanos; regeneración e integración urbana; protección de la flora existente y limitación de las escorrentías superficiales hacia la playa”, apunta.